Las enfermedades cerebrovasculares son un grupo de trastornos que afectan los vasos sanguíneos del cerebro, limitando el flujo de sangre y provocando daños severos en el tejido cerebral. Son una de las principales causas de discapacidad y muerte a nivel mundial.
Además de conocer sus causas y síntomas, es fundamental contar con un seguro de salud que brinde acceso oportuno a diagnósticos y tratamientos. En este artículo, exploraremos la importancia del seguro de salud en la prevención y manejo de estas enfermedades.
Tipos de enfermedades cerebrovasculares
Las enfermedades cerebrovasculares más comunes son:
Accidente cerebrovascular isquémico
Es el tipo más común y ocurre cuando un coágulo bloquea el flujo sanguíneo en una arteria cerebral. Generalmente causado por trombosis (formación de un coágulo en una arteria del cerebro) o embolia (un coágulo que se origina en otra parte del cuerpo y viaja hasta el cerebro).
Accidente cerebrovascular hemorrágico
Se produce cuando un vaso sanguíneo en el cerebro se rompe y provoca sangrado en el tejido cerebral. Generalmente causado por aneurismas cerebrales, hipertensión arterial no controlada o malformaciones arteriovenosas.
Ataque isquémico transitorio
También llamado "mini-ictus", es un episodio breve de interrupción del flujo sanguíneo al cerebro que no causa daño permanente. Sin embargo, es una señal de advertencia de un posible accidente cerebrovascular isquémico en el futuro.
Aneurismas cerebrales
Son dilataciones anormales en los vasos sanguíneos del cerebro que al romperse, causan hemorragias severas. Suelen ser asintomáticos hasta que se rompen, lo que los convierte en una afección peligrosa.
Malformaciones arteriovenosas
Son conexiones anormales entre arterias y venas en el cerebro que debilitan los vasos sanguíneos y provocar hemorragias cerebrales.
Trombosis venosa cerebral
Se produce cuando se forma un coágulo en una vena del cerebro, impidiendo el drenaje normal de sangre y aumentando la presión intracraneal, derivando en un accidente cerebrovascular isquémico.
Causas y factores de riesgo de las enfermedades cerebrovasculares
Las enfermedades cerebrovasculares se deben a múltiples factores, entre ellos:
Hipertensión arterial: Es el principal factor de riesgo.
Diabetes: Aumenta el riesgo de daño en los vasos sanguíneos.
Colesterol alto: Contribuye a la formación de placas en las arterias.
Tabaquismo: Reduce la oxigenación de la sangre y daña los vasos sanguíneos.
Sedentarismo y obesidad: Favorecen el desarrollo de hipertensión y diabetes.
Consumo excesivo de alcohol: Provoca presión arterial elevada.
Síntomas de las enfermedades cerebrovasculares
Los síntomas varían según el tipo de enfermedad, pero los más comunes incluyen:
Pérdida súbita de fuerza o sensibilidad en un lado del cuerpo.
Dificultad para hablar o entender el lenguaje.
Pérdida de visión parcial o total.
Mareos, falta de equilibrio o coordinación.
Dolor de cabeza intenso y repentino.
Prevención y el papel del seguro de salud
Para reducir el riesgo de enfermedades cerebrovasculares, es importante adoptar hábitos saludables:
Controlar la presión arterial regularmente.
Seguir una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras y baja en grasas saturadas.
Hacer ejercicio regularmente.
Evitar el tabaco y el alcohol en exceso.
Controlar enfermedades preexistentes como diabetes y colesterol alto.
Además, contar con un seguro de salud adecuado marca la diferencia en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades cerebrovasculares.
Un buen plan de salud debe cubrir:
Consultas médicas preventivas y chequeos regulares.
Estudios especializados como resonancias magnéticas y angiografías.
Tratamientos de emergencia para enfermedades cerebrovasculares y hospitalización.
Terapias de rehabilitación para recuperación post- enfermedades cerebrovasculares.